El Gobierno de la Ciudad, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano, informa que tras la tormenta registrada esta tarde en Nogales, las estaciones meteorológicas reportaron una captación promedio de 20.63 milímetros de agua en toda la ciudad.

El secretario de Desarrollo Urbano, Jorge Medina, detalló que el embovedado operó en un 25 por ciento de su capacidad, lo que confirma la eficiencia de esta infraestructura en la conducción pluvial.

Uno de los puntos claves durante esta contingencia fue la operación de las rejillas tipo “Irving abatible”, un nuevo sistema que actualmente requiere alrededor de 30 minutos para su retiro, pero con las modificaciones proyectadas podrá realizarse en un tiempo estimado de 10 minutos. Estas rejillas, que anteriormente se encontraban fijas, ahora ofrecen mayor rapidez en la respuesta para evitar obstrucciones en las vialidades.

 “Con el apoyo de Tránsito Municipal y de la Policía, se procedió al cierre preventivo de algunos tramos mientras se abrían las rejillas. Esto nos permitió garantizar la seguridad y mantener la eficiencia en la captación de agua. Nuestro objetivo es reducir de media hora a tan solo 10 minutos el tiempo de apertura gracias a las mejoras en este sistema”, explicó Jorge Medina.

Durante la tormenta, personal de Desarrollo Urbano y Protección Civil detectó el arrastre de sólidos y objetos voluminosos en las vialidades, como sillones, llantas, guardafangos de automóviles, árboles y tablas, que obstaculizan el libre flujo del agua.

“Hoy quedó demostrado que el sistema funciona, pero también que necesitamos la empatía y conciencia de la ciudadanía. El embovedado cumple con su función, pero no fue diseñado para recibir basura doméstica ni muebles en desuso. Estos desechos no solo tapan las rejillas, también representan un riesgo directo para la seguridad de las familias”, agregó el funcionario.

El secretario subrayó que, además de las acciones inmediatas, el Gobierno de la Ciudad trabaja en proyectos de mayor captación y soluciones permanentes que eviten la necesidad de estar abriendo manualmente las rejillas en cada lluvia.

Finalmente, Jorge Medina agradeció la coordinación con la Dirección de Tránsito, la Policía Municipal y Protección Civil, así como la colaboración de la ciudadanía que atendió las alertas oportunamente, lo que permitió mantener bajo control la situación en los puntos críticos de la ciudad.